Constantemente se realizan patrullajes y operativos en el Cerro Alux. En estos participan autoridades de El Consejo Nacional de Áreas Protegidas (CONAP), del Sistema Nacional de Prevención y Control de Incendios Forestales (SIPECIF), de la División de Protección a la Naturaleza (DIPRONA), Policía Municipal Forestal de la Municipalidad de Mixco (PMF).

Patrullajes y operativos en áreas del Cerro Alux
La Cordillera de Mantantiales del Cerro Alux, fue declarada como Área Protegida, por el Congreso de la República de Guatemala en 1997 mediante el Decreto 41-97 es desde este momento cuando se delega al CONAP la coordinación administrativa para establecer las directrices del manejo y conservación de los recursos naturales que posee, en especial de los mantos acuíferos que posee y asiste a gran parte de la zona metropolitana.

Estas acciones se hacen en distintos horarios
El área de este gran cerro, el más grande de Centroamérica, compuesta por cinco mil 372 hectáreas que abarcan los municipios de Mixco, San Pedro y San Juan Sacatepéquez, San Lucas y Santiago Sacatepéquez. Siendo Mixco el que más área posee llegando a un 39%

Evitar incendios forestales, es otras de las acciones que se realizan
Según el reportaje de Prensa Libre, en Revista D “Cerro Alux, un paraíso verde cerca de la ciudad” del 12 de junio de 2016
Fuente de H2O
La Reserva Forestal Protectora de Manantiales Cordillera Alux es un centro de vida. En sus entrañas se mezcla una gran cantidad de recursos naturales como los hídricos que surten la región metropolitana, especialmente a los municipios de Villa Nueva, Mixco y Guatemala, así como a San Lucas y Santiago Sacatepéquez, y Magdalena Milpas Altas, Sacatepéquez.
La médula y la periferia de esta zona boscosa es recorrida por 27 cursos de agua (10 permanentes) que son alimentados por 65 nacimientos, que cada año producen 21 millones 800 mil metros cúbicos de agua, según el Plan Maestro del CONAP.
Estas corrientes abastecen de manera superficial y subterránea, subcuencas estratégicas, como la del río Villalobos donde subsiste una densa población e infinidad de industrias que desfogan en el Lago de Amatitlán.
Verde, verde, verde
Según CONAP, el 60 por ciento de la Reserva todavía se encuentra cubierta de bosque, en el que predomina el mixto compuesto por especies latifoliadas y coníferas.
La diversidad registrada es de 31 especies maderables, como pinos, encinos, ilamos, cipreses y mano de león.
En la montaña también es fácil encontrar 158 de especies no maderables, de las cuales 27 son comestibles, 66 medicinales y 26 ornamentales, y otras.
La cordillera es reconocida por su riqueza de epifitas (bromelias y orquídeas) que cubren las ramas de los árboles maduros y ayudan a captar y almacenar la humedad de la neblina y la lluvia.
Estas especies se caracterizan porque germinan en los troncos y ramas de los árboles y buscan una posición favorable para recibir los rayos del sol.
La mayoría de las epífitas, como el musgo, los líquenes, ciertos helechos y las orquídeas, se sujetan a los árboles con sus raíces que hacen las veces de soporte, casi siempre a unos 50 metros de altura, en la cual viven salamandras, ranas e insectos.
Aire y tierra
La fauna, pese a la amenaza del ser humano, aún es rica. Entre el verdor de la vegetación se pueden apreciar algunos ejemplares, unos ocasionalmente y otros de manera constante. Hay 53 especies de aves, 15 de mamíferos, nueve de reptiles y 16 de mariposas.
Cualquier visitante que se introduzca en el bosque, que cuente con el tiempo suficiente y no se desespere, podrá observar algún conejo, una ardilla, un tacuacín o un zorrillo.
Hay que caminar preparado y no asustarse cuando sorpresivamente se atraviese una lagartija, un cutete o un dragoncito, que es muy característico del área. El turista también puede toparse con culebras cheta, cantil frijolillo, coral o coralillo.
El Cerro Alux es propicio para el avistamiento de aves, pero especialmente durante las primeras horas de la mañana o al caer la tarde, justo cuando el frío y la obscuridad comienzan a apropiarse del lugar.
La Reserva es habitada por gavilanes cola roja, clis clis, chocoyos, pájaros ardilla o pixcoy, lechuzas, trogones de montaña (pariente del quetzal), mot mot de garganta azul, tucanes esmeralda y xaras, entre otras, de acuerdo con el listado del Conap.
Dos huéspedes especiales de estos bosques son el azulejo, que se caracteriza por su plumaje destellante y que abunda en las áreas descubiertas, y el pájaro carpintero, que con sus constantes golpes contra los árboles, se descubre desde una larga distancia.